miércoles, 14 de mayo de 2008

Grietas populares

Un terremoto político ha sacudido la calle Génova y las grietas ya han alcanzado al País Vasco. La unidad que siempre había caracterizado al Partido Popular parece resquebrajarse por completo tras las pasadas elecciones. Todo el mundo contaba con la marcha de Acebes y Zaplana, hombres de Aznar a los que ya se les había pasado el arroz. Pero nadie esperaba serias discrepancias de criterio con María San Gil ni la agresiva campaña de desgaste que está llevando en sigilo Esperanza Aguirre para alcanzar la cúpula.

Hay varias cosas que me llaman la atención del caso de María San Gil. El primero es el motivo de la disputa, que no es otro que el hipotético aperturismo que podría llevar a cabo el PP hacia los partidos nacionalistas y de esta forma tener opciones de formar gobiernos. Tiene razón la presidenta de los populares en el País Vasco cuando dice que este incipiente moderantismo traicionaría los principios básicos del partido. Lo que hay que cambiar son las estrategias, las personas y la actitud, pero no las ideas. El PP tiene que tener en cuenta que esas mismas ideas le dieron la mayoría absoluta hace ocho años, así que no pueden haberse desfasado con tanta celeridad.

De igual modo, me sorprende la hipocresía de algunos medios simpatizantes con el Gobierno. Resulta que María San Gil cuando se presentaba a las elecciones en el País Vasco era una mujer anticuada y sin carisma, y ahora que diverge con Rajoy se convierte en mártir y casi en una pérdida irreparable para su partido. Ver para creer. La que sí parece estar disfrutando de todo este asunto es Esperanza Aguirre. Lo digo porque lo pienso. Últimamente opina sobre todo, como si su posición hubiera levitado y tuviese jerarquía para hacerlo. Y al mismo tiempo sigue mareando la perdiz sobre si se presentará como alternativa a Rajoy para comandar el partido. Pero lo peor no es eso, sino que se recrea en el fango político obviando que no tiene el apoyo ni de sus compañeros ni de la gente de la calle.

2 comentarios:

Yimi Zehcnas dijo...

Aquí no hay ideas políticas que valgan. Esto es todo una conspiración dentro del PP para cargarse a Rajoy y la mejor manera era con la disidencia de San Gil, que sí tiene un peso muy importante dentro del partido. Poco han tardado Acebes y cía en apoyar a esta mujer, que va de sincera pero es de las que las mata callando.

David Díaz dijo...

La inmensa mayoría apoya a Rajoy. Camps apoya a Rajoy y él sí que tiene peso, ya que a día de hoy y a muchos años vista es imposible que en la Comunidad Valenciana gane otro partido que no sea el PP. De todas formas yo creo que Rajoy debería dejar paso a otra nueva cara y la mejor opción sigo manteniendo que es Gallardón.